La vida es
como una leyenda;
no importa
que sea larga,
sino que esté
bien contada.
La esperanza
hace que agite
el náufrago
sus brazos en medio
de las aguas,
aún cuando
no vea
tierra por ningún lado
El tiempo
es un gran maestro,
y pone
en su lugar
muchas cosas.
Muy frecuentemente
las lágrimas,
son la última
sonrisa del amor,
No dejes pasar
este día
sin haber hecho
algo que
contribuya
a la realización
de tus sueños.
Nos comviene
volver al silencio
para saborear más
la palabra.
El conocimiento
es un acopio de datos;
la sabiduría,
en cambio,
consiste en saber
aplicar los
conocimientos.
Si olvidas
las heridas que
te hayan hecho,
tu corazón
quedará en libertad,
para vivir y amar
en plenitud.
A medida
que los años pasan,
es necesario
reconquistar
la infancia
para poder
conservarla.
Si iniciamos
una discursión
entre el pasado
y el futuro,
advertimos
que hemos
perdido
el presente.
La paciencia
es la fortaleza
del débil,
y la impaciencia
la debilidad
del fuerte.
Trabajar
en la enseñanza,
supone
aprender
todos los días.
Amar significa
colocar
la propia felicidad
en la felicidad
de los otros.
Haz que el mundo
sea un poco más
hermoso y mejor,
por haber vivido
tú en el.
La alegría
del corazón
constituye
buen remedio,
para un espíritu
abatido.